domingo, mayo 10

Contistución Interna del Hombre en el Antiguo Egipto 03 - El Corazón

El Corazón

Psicostasia

Para los antiguos egipcios el corazón se corresponde con dos conceptos, uno es el corazón-mente, y el otro el corazón psíquico-emocional que influencia con sus cambios los latidos del corazón físico. En todo caso el corazón representa la conciencia en movimiento. Esta misma concepción la encontramos también en la antigua China, donde reciben el nombre de fuego imperial y fuego ministerial respectivamente.

En las ceremonias de momificación se sustituye el corazón por un escarabajo verde. El escarabajo es en sí mismo un jeroglífico y su significado es un verbo que puede traducirse por “llegar a ser” “convertirse en”, “evolucionar”, “transformarse”. Y precisamente eso es la conciencia: basta preguntarse por la percepción actual y presente de nuestra conciencia, y veremos que antes de terminar de formularse la pregunta en nuestra mente, el tiempo pasa y convirtiendo esa percepción en pasado. Si preguntamos acerca del futuro, éste no existe, hasta que llegue a ser presente, y acerca del pasado solo podemos decir que es un recuerdo en nuestra memoria... La conciencia es precisamente aquello que, indisolublemente unido al tiempo, viaja a través del mismo, e incluso crea la ilusión del tiempo.
Escarabajo amuleto con oración 30b

Como hemos señalado anteriormente, esa división del corazón es de dos tipos, uno es el corazón "ib" o corazón mental, y el otro es el corazón "haty" o psíquico-emocional y físico. En la famosa escena de la psicostasis o Juicio de la Conciencia, ambos están presentes. Habitualmente en el dorso de esos escarabajos ceremoniales que representaban al corazón se grababa una recitación, la conocida como 30b entre los egiptólogos. Veamos su significado: 

¡Oh corazón (Ib) celeste de mi madre (Mut)!, !Oh corazón de mi madre!, ¡y tu mi corazón (haty) terrestre de mis múltiples transformaciones! No te levantes contra mi como testigo, no me seas hostil en presencia de los dioses que mantienen la Balanza, pues eres el "ka" que estaba en mi cuerpo, el protector que mantiene mis miembros sanos. Ve al lugar feliz hacia donde corremos, no hagas que mi nombre apeste ante el séquito que forja a los hombres. No digas mentiras acerca de mi en presencia del dios (Osiris). ¡Es bueno que así lo oigas!

En el texto anterior, se identifica el corazón Ib, como relacionado con Mut, la diosa madre por excelencia, representando aquí un doble significado, por un lado Mut es la gran protectora, tal como aparece en una oración de un fiel devoto:

"Mi corazón se ha llenado con mi señora. No tengo miedo de nadie. Permanezco dormido plácidamente toda la noche, porque tengo a mi protectora"
Mut
Mut

Pero además Mut es también la diosa de los inicios, que junto a Nun, las aguas primordiales, representa a la Madre Primordial también, y en ese sentido es la madre celeste, y lo celeste por extensión. Por tanto el corazón Ib se refiere al corazón eterno, a la conciencia que va más allá de esta vida. 

En el mismo texto se habla del "corazón terrestre de mis múltiples transformaciones". Es el corazón "haty" fuertemente relacionado con nuestras cambiantes emociones, y es el corazón terrestre, o sea la conciencia encarnada. 

Ambos constituyen mi conciencia, celeste y terrestre, y a ambos se les pide no traicionarme en el juicio. Si un juez divino nos preguntase sobre nuestros actos y pensamientos, sobre la maldad o bondad e intención de los mismos, lo más probable es que dudásemos de nosotros mismos, esperaríamos no desdecirnos, que nuestra mente no nos traicionase mostrando nuestras auténticas intenciones. 

El corazón/conciencia es también, como dice la oración, quien mantiene sanos mis miembros, o sea la integridad de mi cuerpo. Obsérvese como la vejez trae de la mano no sólo el deterioro mental sino también el físico, y cuanto más intenso el primero más decadencia muestra el segundo, véase como ejemplo las personas que padecen Alzheimer. La oración pide finalmente que el "nombre" no huela mal, o sea que no sea un yo podrido o corrupto, delante de los que forjan al hombre ni delante de Osiris, o sea el juez en el tribunal de la conciencia. 


El corazón es representado como un receptáculo, una especie de jarra, un contenedor, que además muestra en muchas ocasiones asas y boca con plumas, porque lo que contiene es el pájaro álma o Ba. Sus representaciones pictórica nos muestran una semiluna y una forma ovoidea, que hacen referencia a la conciencia lunar y a la conciencia solar respectivamente, o sea los dos habitantes de nuestra conciencia: la parte mental pura y la parte psíquica inferior. Curiosamente en una imagen o corte anatómico del corazón, se observan precisamente como los dos ventrículos adoptan esas formas, siendo el izquierdo más abultado y redondo y el derecho mas aplastado y semilunar. 

Corte anatómico: ventrículo izquierdo abajo, derecho arriba

Lo que el corazón contiene se libera después de la muerte en dos componentes, uno solar y otro lunar. El alma-pájaro o Ba, la parte libre y limpia de escorias de la conciencia, y la Sombra, los elementos psíquicos inferiores que se disuelven y desaparecen a no ser que estén protegidos por el alma-pájaro y por el Ka. 

Sombra sale de la tumba, Ka detrás
supliendo energía. Ba arriba protegiendo

Pero eso sería solo en caso de iniciados, porque para todo el resto de los seres humanos, nuestro ka y sombra se disuelven, imposibilitando el contacto con este mundo, y el Ba junto al espíritu se integra, usando teŕminos egipcios, en la "luz esplendente del horizonte", hasta que la hora suene para retornar.